Caracas del siglo XX al XXI
Las obras arquitectónicas del Siglo XX dieron paso a la era moderna
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DAYANA VÁSQUEZ VÁSQUEZ | EL UNIVERSAL
domingo 3 de mayo de 2015 12:00 AM
Caracas, ciudad cubierta de sobresalientes estructuras arquitectónicas, diseñadas a partir de los años 1900, exhibe destacadas obras civiles realizadas por profesionales que fueron protagonistas del inicio de la era moderna en la capital.
Alejandro Chataing, Juan Hurtado Manrique, Luis Muñoz Tébar, Carlos Raúl Villanueva, Luis Roche, Tomás José Sanabria y Pepe Montañés, son algunos de los expertos que encabezan la lista del auge organizativo de la llamada ciudad de los Techos Rojos.
La Cota Mil, los distribuidores La Araña, El Pulpo y El Ciempiés, las Torres del Silencio, El Helicoide y el Metro de Caracas, figuran entre las obras de gran envergadura que identifican a la urbe como una ciudad de acelerado crecimiento en materia de construcciones en el siglo XX.
Como un homenaje a la prominente ingeniería civil que muestra Caracas, Andrés Rojas, coordinador de Comunicaciones de la empresa Vepica, auspició la proyección del documental "Caracas, Crónica del siglo XX", dirigido por Carlos Oteyza, con guión de Salvador Garmendia y editado por Bolívar Films, el cual está circunscrito al desarrollo arquitectónico y de ingeniería civil de Caracas durante ese siglo.
De la colección de fotos de "Caracas, la ciudad moderna" y del archivo fotográfico Shell/CIC-UCAB, el documental deja constancia que la capital fue escenario de obras que lograron la proyección en el tiempo por su calidad y precisión arquitectónica.
El español Pepe Montañés, quien participó en el conversatorio del documental y fue el diseñador y constructor del distribuidor Ciempiés, el calculista del distribuidor La Araña, entre otras creaciones, indicó que en su llegada al país la estructura que lo impactó y que considera la más emblemática, fue El Silencio.
"La labor más importante de una determinada construcción es el correcto cálculo en dimensiones. Los edificios que cayeron ante el terremoto de 1967 fueron a causa de un mal cálculo. Caracas es una ciudad que creció de forma apresurada y estoy contento de haber participado en muchas de sus obras", aseguró Montañés.
Debido al crecimiento demográfico y exceso de vehículos, en el siglo XXI continuaron las construcciones de edificaciones que han servido como respuesta a los problemas que ocasiona la sobrepoblación.
Montañés expresó que la cimentación de nuevas plazas, puentes, vialidades superficiales y subterráneas, permiten que la historia arquitectónica del siglo pasado estimule a los autores del nuevo siglo a mantener el legado.
Alejandro Chataing, Juan Hurtado Manrique, Luis Muñoz Tébar, Carlos Raúl Villanueva, Luis Roche, Tomás José Sanabria y Pepe Montañés, son algunos de los expertos que encabezan la lista del auge organizativo de la llamada ciudad de los Techos Rojos.
La Cota Mil, los distribuidores La Araña, El Pulpo y El Ciempiés, las Torres del Silencio, El Helicoide y el Metro de Caracas, figuran entre las obras de gran envergadura que identifican a la urbe como una ciudad de acelerado crecimiento en materia de construcciones en el siglo XX.
Como un homenaje a la prominente ingeniería civil que muestra Caracas, Andrés Rojas, coordinador de Comunicaciones de la empresa Vepica, auspició la proyección del documental "Caracas, Crónica del siglo XX", dirigido por Carlos Oteyza, con guión de Salvador Garmendia y editado por Bolívar Films, el cual está circunscrito al desarrollo arquitectónico y de ingeniería civil de Caracas durante ese siglo.
De la colección de fotos de "Caracas, la ciudad moderna" y del archivo fotográfico Shell/CIC-UCAB, el documental deja constancia que la capital fue escenario de obras que lograron la proyección en el tiempo por su calidad y precisión arquitectónica.
El español Pepe Montañés, quien participó en el conversatorio del documental y fue el diseñador y constructor del distribuidor Ciempiés, el calculista del distribuidor La Araña, entre otras creaciones, indicó que en su llegada al país la estructura que lo impactó y que considera la más emblemática, fue El Silencio.
"La labor más importante de una determinada construcción es el correcto cálculo en dimensiones. Los edificios que cayeron ante el terremoto de 1967 fueron a causa de un mal cálculo. Caracas es una ciudad que creció de forma apresurada y estoy contento de haber participado en muchas de sus obras", aseguró Montañés.
Debido al crecimiento demográfico y exceso de vehículos, en el siglo XXI continuaron las construcciones de edificaciones que han servido como respuesta a los problemas que ocasiona la sobrepoblación.
Montañés expresó que la cimentación de nuevas plazas, puentes, vialidades superficiales y subterráneas, permiten que la historia arquitectónica del siglo pasado estimule a los autores del nuevo siglo a mantener el legado.
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